He visto a las mentes más brillantes de mi generación en TikTok
Por Jorge Contreras Herrera*
Mayo, 2021
He visto durante los últimos meses videos en TikTok. Han sido momentos de diversión y admiración por la creatividad que imprimen algunas personas en producir contenidos. Algunos geniales, otros ridículos. Pienso en la cultura, en nuestra forma de adaptarnos y expresarnos en los diferentes tiempos y circunstancias. Hace cuatro lustros ya se hablaba de cibercultura, de radio por internet, de trabajar en redes.
Nos enviábamos contenidos por correo electrónico. Los foros eran quizá, lo más parecido a las RRSS, aunque pronto surgieron propuestas como Netlog, hi5, Myspace, Yahoo Groups y los blogs. Myspace fue un espacio usado especialmente por los músicos y melómanos. Hoy los podcasts y las playlists son las formas de expresión musical más conocidas y usadas.
La llegada de Facebook y Twitter causaron la revolución que cambió la manera de relacionarse. Ya no más las instituciones como por ejemplo el Consejo Estatal para la Cultura y las Artes, Casas de Cultura o Bibliotecas, ya que en general, en el caso de México, eran estas las que se encargaban de invitar a Festivales, Congresos, etc., a escritores. Entonces cualquiera podía enviar un mensaje a otro u otra. La comunicación cultural ya no era controlada por los departamentos de cultura y esto generó un movimiento internacional sin precedentes. Nacieron revistas en línea y por supuesto, festivales, encuentros, editoriales o entre otras manifestaciones o contenidos. Todo esto gracias a las RRSS.
Cada revolución industrial ha cambiado la configuración de la cultura. El vapor, la electricidad, la radio, la televisión, el internet. En ese orden, estamos en la quinta revuelta.
Con el 2020 llegó la pandemia y la virtualidad como maremoto. Escuelas, vida, trabajo. Todo ha sido llevado a otros niveles poco imaginados. Lo mismo que cuando nació la imprenta, los escribanos memoriosos y copistas pusieron resistencia, nada pudieron hacer más que adaptarse. Ahora, los propios rotativos han migrado a las páginas web. Se consulta el diario, se ve televisión e incluso se escriben obras literarias en el teléfono.
Los fenómenos culturales nos toman por sorpresa. Quizá las nuevas generaciones no se den cuenta de los múltiples cambios que sugiere pasar del mundo análogo al digital. Es un momento en el que todo el mundo tiene voz y se expresa.
La onomatopeya de un reloj de manecillas, de una bomba de tiempo, de un marcapasos, es TikTok. Emula la brevedad, además de ser fácil de recordar y entender de qué se trata. Contenidos apropiados para el homo videns, pero a diferencia del teledirigido es el teledirigente. Ya no es recibir solo contenido, sino producirlo. En este sentido, he visto fragmentos del pensamiento de Borges o de Octavio Paz, debates entre académicos, micro talleres de escritura y muchísimo más.
El primero en recomendarme TikTok fue mi webmaster, Carlos Millán, director técnico de ablucionistas.com argumentando la forma en que trabajan los algoritmos. Comencé a reflexionar al respecto. Vi que tanto Facebook y twitter son pueblos, condominios. Nuestro vecindario es lo que llamamos una red social. En mi caso, el 70 u 80 por cierto son contactos del mismo medio, otro pequeño porcentaje, amigos y familiares. Si veo la red de un músico, sus nudos son músicos, gente de su industria. En el caso de TikTok, es muy aleatorio. Es igual a ser turista todo el tiempo. No sabes qué encontrarás. En ese sentido, en menos de un año, he sido sorprendido por contenidos culturales de gran calidad, más de lo que he encontrado durante 15 años en Facebook.
Hay gente muy creativa y claro, hay quien solo busca distraerse. Ha sido una forma de entrar como espectador a los corazones de hogares y de la cultura más remota a la mía. Así he visto como cocinan en algún pueblo de la sierra oriental mexicana, o de la lejana China, he escuchado leyendas del Perú, como la confesión de una anciana, o he recibido las recomendaciones cibernéticas para trabajar mejor. Creo que aún muchos subestiman a TikTok. Y como diría el meme de Malcon, el de en medio: “El futuro es hoy”.
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*Jorge Contreras Herrera (México 1978). Poeta, director general de ablucionistas.com Ha publicado diez libros de poesía. Dos de ellos en el extranjero: Vedo un coniglio guardarmi dalla neve, traducción al italiano por Emilio Coco en Rafaelli Editore y Ballena 52, editorial Buenos Aires Poetry. De igual manera Participación en antologías internacionales y nacionales. Sus poemas se han traducido al italiano, alemán, portugués, náhuatl, inglés, búlgaro, árabe, catalán. Asimismo, cantantes como Zaira Franco y Enrique Ramírez Cipactli han musicalizado sus poemas. Es el fundador de Poetas sin Fronteras, el Word Festival Of Poetry Santuarios Poéticos. Propietario de la marca Registrada: Festival Internacional de Poesía en México y sus siglas FIP. Director del Festival Internacional de Poesía Ignacio Rodríguez Galván. Miembro del comité del Festival Internacional de Poesía de la Habana y Presidente Honorario para el 2018. Ha recibido la Presea al Mérito Cultural y Literario Raúl Renán, el Reconocimiento Universitario al Fomento de la Lectura Profesor Rafael Cravioto Muñoz.
