Noticias desde Guadalajara

por Melanie Gómez Campos

Guadalajara, México - diciembre, 2019

Fotos cortesía: Poiesis Instagram: @poiesisipih

 

Cayeron los stand, desaparecieron los libros y con ellos la gente. El pasado domingo 8 de diciembre se dio cierre a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, México. La feria del libro más grande de Latinoamérica.

Si bien la FIL da lugar a escritores consagrados y grandes casas editoriales, también es cierto que, quizá más oculto, podía encontrarse el trabajo de escritores jóvenes y editoriales independientes, tal como lo fue Entre autores, un encuentro entre nuevas plumas de Colombia, Chile y México.

La lógica de este encuentro es dar un espacio a las voces que incursionan en lo que el escritor mexicano Airy Sindik mencionó como “la cancha de tierra de la literatura”, pues es difícil romper con las grandes narrativas y más aún competir contra los gigantes editoriales. Este año, y en la primera edición de Entre autores, se presentaron tres mesas de trabajo inauguradas con las palabras del escritor Paco Ignacio Taibo II.

Paco Ignacio Taibo II - Fotografía, Facebook
Paco Ignacio Taibo II - Fotografía, Facebook

En el stand de Fondo de Cultura Económica se habló de La oscuridad del continente, otras maneras de contar nuestras realidades, con la participación del escritor oaxaqueño Israel Castro y el autor colombiano Néstor Fabián Pulido, quienes compartieron a través de la novela negra y el terror la idea de Taibo respecto a la manera en que narramos el continente y la necesidad de conjuntar las narrativas para relatar la realidad tan compleja que puede representar hablar de una sola Latinoamérica.

La novela A las puertas del Abismo de Néstor, y Cofradía canalla de Israel, dieron pase a un cuestionamiento en torno al papel de la ficción como una herramienta que permita explorar desde otras perspectivas los contextos que atañen a la sociedad y el individuo.

Un apocalipsis zombi y un mundo en devastación llegó con la distopía de Néstor, quien lleva de la mano al lector hasta que este se encuentre a las puertas del abismo. La oscuridad continuó con un asesino a sueldo que Israel acompaña a lo largo de las páginas que dan vida a su novela negra.

Néstor Pulido e Israel Castro
Néstor Pulido e Israel Castro

En el stand de la delegación de Chile se llevó a cabo un diálogo en torno a La poética desde Río Bravo hasta tierra de fuego, tema que retomaron las escritoras María José Cumplido de Chile, Lorena Huitrón de Veracruz y el escritor colombiano Santiago Sepúlveda, quien dio lugar a la importancia del trabajo del autor y el lector al afirmar que “las palabras pueden ser dichas para destruir”.

“Dar voz a los personajes que no están en las narrativas oficiales”, fue una de las maneras en las que María José hizo referencia a su libro Chilenas rebeldes, concordando así con Lorena quien pretende con su poemario Wintu dar voz a la lucha para “desmitificar la violencia y el significado de ser mujer”.

Así mismo, Santiago retoma ese y otros cuestionamientos para dar espacio a las voces olvidadas de una Colombia viva entre la memoria y el olvido, aspectos que retoma en su novela Ayer terminará mañana.

A través de la poesía los autores dialogaron sobre la diversidad de las voces y los grupos. Mientras María José escudriñó hasta encontrar a la mujer en los espacios políticos de Chile, y escribió para acallar “la necesidad de no quedarse con algo en la cabeza”, Lorena Huitrón narró como acto de protesta el significado de ser mujer para ella y para sus lectores, con un trabajo de poesía que, comenta Santiago, “le atacó mucho” en el sentido de cuestionar desde su papel como hombre e hijo.

María José Cumplido, Lorena Huitrón y Santiago Sepulveda
María José Cumplido, Lorena Huitrón y Santiago Sepulveda

La última mesa abrió el tema de Periodismo urgente, la realidad y la ficción de nuestra América, en el stand de Colombia. En un recorrido desde Chile con la escritora Arelis Uribe, Colombia con Cristina Bendek, hasta México y la primavera árabe con el escritor Airy Sindik.

Arelis Uribe presentó su libro Quiltras, Cristina Bendek compartió un poco acerca de su libro Cristales de Sal y Airy Sindik colocó sobre la mesa el debate en torno a los retos y oportunidades de la escritura de no ficción con su novela Sin aire para el regreso, llevando a los presentes hasta la primavera árabe.

Cuando las narrativas tradicionales del periodismo parecieran haberse agotado en distintos términos, la literatura retoma de sí para tratar de explicar más allá de la inmediatez en la información y las formas que componen los discursos, estos autores buscan nuevas maneras de contar historias y a su vez tratar de explicar o comprender aquello que en la realidad se adolece en una escala social.

 

Airy Sindik, Cristina Bendek y Arelis Uribe
Airy Sindik, Cristina Bendek y Arelis Uribe

FIL fue también hogar de poetas sin libros publicados, escritores que repartían sus propios flayers y presentaciones en las que la ficción o el autor en turno eran subestimados por los medios. La cobertura y los espacios más solicitados constaban de contar muchas veces con la presencia de un escritor consagrado.

Bajo este contexto es que Airy Sindik habla de romper los esquemas bajo los cuales se ha trabajado en el campo de la literatura, es por ello que entre autores prevé la posibilidad de regresar a los pasillos de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara para traer consigo a las nuevas propuestas en la poesía, la ficción, el periodismo narrativo, y continuar cuestionando cómo se narra una realidad, para dar voz a las nuevas plumas de Latinoamérica.

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