Capacidades Especiales 

LA INCLUSIÓN DE LA BELLEZA DIVERSA 

Por María José de la Tierra

Diciembre 2017

"Quien mira hacia afuera, sueña; Quien mira hacia dentro, despierta" 

Carl Gustav Jung

Indudablemente, tenemos cimentado un concepto de belleza mal construido y tatuado en un subconsciente colectivo. Para ello nos basamos en la normalidad, la funcionalidad, lo estético, lo voluptuoso, lo que consideramos sexual, la educación, lo que dice el hogar, lo que nos muestra la sociedad y lo que se supone está en marcha..., factores que han establecido inconscientemente un ideal predeterminado de la belleza en uno mismo y en el otro, y además aquellos elementos que específicamente nos hacen considerar la beldad en algo o alguien. En este punto juzgamos las bellezas que no entendemos; estéticas diversas que no dejamos entrar, ignorando que junto a ellas viene un panorama más amplio de la existencia y de la vida en el arte.

El cambio es el primer plano en este discurso. El ser humano necesita ser libre en su diferencia y reconocer al otro; la reciprocidad de aceptar nos construye no como diferentes, sino como únicos. Es bello porque no solo hablamos de las personas en situación de discapacidad, nos referimos a un TODOS y es aquí cuando debe incubarse la Inclusión. El Arte, entonces, nos permite interactuar e integrarnos en lenguajes diversos y múltiples. En este aspecto, la diferencia crecerá cada vez más. ¿Será parte de aceptar nuevas bellezas? Aceptar, si. Dejar entrar o salir pero juntos.

Una belleza singular, no debería impactar por su condición no normalizada; más bien, recalcar "por ser quien es y como es", Se asoma el valor, palabra que también tenemos sobreestimada, mal enfocada, intolerante...  Perder su verdadero significado ha hecho invidente al ser humano, inconforme, al anhelar una imposición cultural y biológica de cómo se tiene que ser, luchando día a día por ella, alcanzando jerarquías, materialidad, imagen, conformismos de un caminante -o no- que no es libre. El valor viene de adentro y La pregunta es: ¿Qué alcanzamos? ¿Qué acumulamos? ¿Dónde está la belleza?

Estas preguntas se responden solo cuando se sabe Ver, cuando la expresión de la existencia retumba y en la "diferencia" se ve la gracia de lo que somos. No hay que ir lejos ni buscar afuera algo que nace adentro. Todo lo que entendemos por Normal es impuesto y está en un tiempo pasado. En el aquí y ahora debe primar la singularidad y con ella una resignificación de la  belleza. El buen cambio y el valor es el principio para muchos cuerpos diversos o no que deben salir y defender su propia construcción,orgullosos de la belleza que nos cultiva, coraje para la belleza que se diferencia. Aprender a ver,  aceptar, tolerar, abre la puerta a la inclusión de la belleza diversa, entendiendo que, aunque viene de un factor exterior y superficial,se construye en la profundidad de cada uno. El cuerpo se va junto con la concepción que se tiene de Belleza, ¿qué queda? ¿Cuál es la belleza  realmente importante?

Incluyamos todo tipo de belleza en las posibilidades de empatizar en ellas para nuestro propio camino.  Cuando empezamos en nosotros mismos podemos ir por el otro y sentirnos una vez más no como un UNO si no un JUNTOS.

La Belleza nos habita si sabemos verla. Seamos conscientes de ella para agregarla al cambio.