Antorchas
Por Mónica Lucia Suárez*
Abril, 2021
Las “Antorchas” de Jorge Osbaldo entrecruzan la brevedad del cuento y la rotundidad del aforismo, a través de hechos únicos y muy visuales, que transcienden la anécdota y crean la intensidad necesaria para sorprender al lector; superan sus expectativas y lo llevan a buscar un sentido dentro de lo que con humor e ironía acaba de hallar.
Juega con la ambigüedad del lenguaje y la elocuencia de lo que no se dice, a través de una economía expresiva en la que cada palabra significa algo dentro del relato. Jorge Osbaldo sugiere; y la fuerza de sus escritos está en lo sugerido, más que en lo descrito. “Los poetas Verlaine y Rimbaud acaban su faena de amor. Extenuados, pero felices, ahora escriben un poema. A lado y lado de la cama, con la mano libre, cada uno acaricia un revólver”.
¿Homenajes? Seguramente. Cada antorcha nombra a vivos, muertos, seres imaginarios e históricos. Intriga al lector, lo lanza en medio de una acción o una imagen evocadora que le lleva a seguir leyendo porque quiere saber qué ocurre.
El estilo único del autor permite que las antorchas se enciendan cada vez que se leen. Sea, pues, la ocasión para hacerlo.
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*Mónica Lucia Suárez Beltrán
Profesional en Estudios Literarios y Magíster en Educación, Universidad Nacional de Colombia. Investigadora y autora de textos académicos y literarios. Ha liderado Talleres locales de escritura creativa en Idartes y participado como jurado en Festivales y concursos literarios nacionales. Es consejera distrital de cultura en Literatura y líder de Poesía expandida Colombia.
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